La estética de las orejas es uno de los aspectos más importantes en la belleza facial. Según su tamaño, forma y posición con respecto al rostro, se distinguen varios tipos de orejas. En este artículo, te presentamos los más comunes y sus características.
Tipos de orejas según su tamaño
La clasificación de las orejas según el tamaño hace referencia a la dimensión de la oreja con respecto al resto de la cabeza. En concreto con respecto a la longitud que existe entre el punto entre las cejas (punto interglaberal) hasta el punto donde termina la nariz en el labio (punto subnasal). Podemos distinguir dos tipos.
Orejas pequeñas o proporcionadas

Las orejas pequeñas u orejas proporcionadas tienen un tamaño menor o armónico en comparación al resto de la cabeza. El tamaño perfecto de las orejas se calcula mediante estudios de anatomía comparada, siendo el tamaño perfecto y más armónico una distancia de entre 5.5 cm y 6.6 cm entre el punto interglabelar y el punto subnasal.
Cuando existe esta proporción, la persona tiene una apariencia delicada, armónica y equilibrada, haciendo que destaquen otros elementos de la cara, como los ojos, los labios o los pómulos.
Cuando el pabellón auricular mide menos de 5,5 centímetros o menos de la distancia entre el punto interglabelar y el punto subnasal, no serán orejas armónicas ni proporcionadas con el resto de la cara, denominadas microtia. Orejas demasiado pequeñas están relacionadas con síndromes genéticos como el síndrome de down, por lo que huiremos de orejas demasiado pequeñas que pueden dar un aspecto patológico.
Orejas grandes o desproporcionadas

Se consideran orejas grandes aquellas cuyo tamaño es mayor a la distancia entre el punto interglabelar y el punto subnasal. Este tamaño da un aspecto de orejas demasiado grandes en relación con el resto de la cabeza; un crecimiento excepcional que se denomina macrotia (longitud de la oreja de más de 6.5 cm o mayor a la distancia entre los puntos interglabelar-subnasal).
Algunas personas pueden sentirse incómodas o acomplejadas por tener este tipo de orejas. No obstante, en este caso, la cirugía plástica facial ofrece soluciones muy efectivas como son la otoplastia de reducción.
Tipos de orejas según la forma del pabellón auricular
El pabellón auricular es la parte más externa del oído, y está encargada de recoger las ondas sonoras. La forma del pabellón auricular no viene determinada por la herencia genética (95% de los casos) sino que, principalmente son alteraciones congénitas producidas durante el desarrollo del bebé. Además, los cambios en la forma de las orejas suelen afectar de forma unilateral.
Orejas redondeadas

Las orejas redondeadas tienen un contorno suave, sin curvas ni ángulos pronunciados. Se trata de una de las formas más comunes.
Orejas alargadas

Estas orejas tienden a ser más largas de lo habitual (> de 6,5 cm). Las orejas se alargan normalmente a expensas de un lóbulo demasiado grande o de una ausencia de plicatura del antehelix.
Las personas con edad presentan lóbulos alargados, puesto que los lóbulos de las orejas son la única parte del cuerpo que no deja de crecer a lo largo de la vida. De hecho, este rasgo de lóbulos alargados está representado en algunas religiones (budismo), como un signo de sabiduría asociado a la experiencia. Sin embargo, en nuestra cultura los lóbulos grandes son signo de envejecimiento por lo que disminuir el tamaño del lóbulo va a producir un rejuvenecimiento facial muy importante. La longitud del lóbulo también está influida por factores externos como son el uso de pendientes muy pesados o dilatadores.
Orejas triangulares o de elfo

En algunas personas, las orejas pueden tener un contorno más anguloso, de forma picuda, asemejándose a una forma triangular, como las orejas del Dr. Spock que protagonizaba la mítica serie de los 70 “Star Trek”. Este tipo de anomalía se produce por la existencia de un tercer pliegue entre el antehélix y el hélix. Su causa es desconocida y suele ser unilateral. Este problema congénito recibe el nombre de “orejas de Stahl”.
Orejas con lóbulos adheridos o libres


Un rasgo que sí está determinado genéticamente y que influye de forma relevante en la apariencia, es el tipo de lóbulo que se tiene. Las orejas con lóbulos adheridos son aquellas donde la parte inferior de la oreja se une directamente con la cara, sin una separación visible.
Por el contrario, las orejas con lóbulos libres o pendulares presentan una separación clara entre el lóbulo y la cara. Los lóbulos libres se heredan de forma dominante, mientras que los lóbulos adheridos son de herencia recesiva. El tamaño y tipo de lóbulo va a determinar las opciones de tratamiento de este, mediante una cirugía de lobuloplastia.
El lóbulo suele representar el 20% de la longitud total de la oreja. Cuando el lóbulo es mayor a esta proporción estaría indicada hacer una lobuloplastia que generará un importante impacto en el rejuvenecimiento facial.
Tipos de orejas según su posición
La altura y orientación de las orejas en relación con los ojos también puede variar.
Orejas altas o bajas


Las orejas situadas en una posición más elevada, cerca de los ojos o ligeramente por encima de ellos, son relativamente raras. Las orejas más bajas, que se colocan a la altura de la nariz o debajo, son más comunes, aunque se pueden asociar con enfermedades sindrómicas como son el síndrome de Down.
Orejas prominentes o “de soplillo”

Uno de los tipos de orejas más conocidos es el de las orejas prominentes, , “orejas en asa” o «de soplillo«, que sobresalen notablemente del cráneo. Se trata, en la mayoría de ocasiones, de una alteración en la orientación de la oreja con un mayor ángulo de proyección de la oreja con respecto del cráneo.
Este tipo de oreja se produce generalmente por dos anomalías en el desarrollo del cartílago auricular.
- Ausencia del pliegue del antehélix, que consiste en que el tercio superior de la oreja no se pliega correctamente en el desarrollo dejando la porción superior de la oreja más visible.
- Exceso de crecimiento de la concha auricular (hipertrofia de la concha) -la concha es la porción del pabellón con forma de cuenco que da entrada al orificio del oído-. Cuando existe un crecimiento excesivo de este cartílago auricular se produce una separación excesiva de la oreja del cráneo.
Las orejas de soplillo son una característica común en la población general, puesto que se presenta en el 5% de los individuos de raza caucásica. A menudo estas orejas despegadas se ven como una característica distintiva en algunas personas, pero es común que las personas con orejas prominentes se sientan inseguras al respecto. No obstante, la otoplastia es el procedimiento quirúrgico para corregir las orejas de soplillo y terminar con estos complejos. Se caracteriza por ser una cirugía estética con alta satisfacción de los pacientes que puede corregir tanto el tamaño como esta posición poco estética de las orejas. La otoplastia puede realizarse en niños, normalmente a partir de que hayan finalizado el desarrollo facial, y en adultos.


La influencia de la genética
Mientras que la forma y el tamaño de las orejas no suele estar determinada únicamente por factores genéticos hereditarios, la altura de las orejas con respecto a la cabeza sí suele relacionarse con algunos síndromes genéticos. Esto hace que los profesionales médicos presten atención a las orejas como un indicador de posibles trastornos.
Las orejas no son solo una parte funcional de nuestro cuerpo encargada de la audición, sino también un rasgo de envejecimiento y belleza que puede tener múltiples formas y características únicas. Desde el tamaño hasta la forma de los lóbulos, los diferentes tipos de orejas reflejan la belleza y la edad de la persona. Si estás pensando en una intervención para mejorar tus orejas, el Dr. Ramón Terré realiza la otoplastia en Zaragoza; un proceso en el que te asesorará y realizará una cirugía personalizada para obtener los mejores resultados.


































































































































































































































